No me perdones

No me perdones, amor,
no me perdones…

Déjame extrañarte
siete días por semana
sabiéndote mío.

Déjame sedienta
con la abundancia
del cauce desbordado.

Déjame hambrienta
con las viandas expuestas
en la vitrina.

Déjame ausentarme
con la distancia prohibida
del hijo pródigo.

Pero no me perdones, amor,
no me perdones
hasta que no sepa
contar las estrellas
de una en una.

María Otal
19-02-07